Sor Alzira Sousa, Hija de María Auxiliadora y directora del Externato Nossa Senhora do Rosário, en Cascais, conversó con Mariana Lagoas y Henrique Laureano, en otra edición de la JMJ con Bosco.
En un programa que recordaba la Jornada Mundial de la Juventud de 1989, realizada en Buenos Aires, Argentina, sor Alzira Sousa afirmó que para reconocer el amor de Dios es fundamental tener “un corazón disponible y muy abierto a reconocer los signos”. . Ya que, en su opinión, los jóvenes están dispuestos a hacerse esta pregunta, sobre el amor de Dios, los “desafía”.
Reconociendo la importancia de este encuentro de 1989 en Buenos Aires, que “trasladó el centro de la Iglesia [que era Roma] a otro continente”, sor Alzira Sousa también se refirió a que en ese mismo momento se invitó a los jóvenes a “conocer a Jesús , conocer su Palabra y expresar ese amor en gestos de solidaridad y fraternidad”, dando continuidad a la “Civilización del Amor”, que tanto destacó el Papa Juan Pablo II.
Sor Alzira Sousa finalizó su testimonio destacando la Jornada Mundial de la Juventud como un momento de “confirmación de fe, de alegría y de gran comunión.