Don Bosco inició la tradición de celebrar la «Noche Buena» con sus muchachos cada noche en el oratorio. Hoy la tradición continúa y en todas las casas salesianas la «Noche Buena» es el momento en que todos se reúnen para dar gracias, rezar y estar más cerca de Dios.
El SYM Day, la gran fiesta del Movimiento Juvenil Salesiano en la Jornada Mundial de la Juventud, no podía terminar sin el conocido «Good Night» del Rector Mayor de los Salesianos y de la Madre General de las FMA.
El Día del MJS es uno de los momentos más esperados por el Movimiento Juvenil Salesiano durante la Jornada Mundial de la Juventud. Esta gran celebración reunió a más de ocho mil miembros del MJS en los Salesianos de Estoril para una gran fiesta de familia.
Caracterizada por la alegría y la fraternidad, con música y animación, la jornada contó con diversas actividades y juegos, muy al estilo del oratorio de Don Bosco. Al final del día, en la Vigilia, experimentamos la gratitud por la riqueza del carisma de Don Bosco. Fue un momento de adoración eucarística, que terminó con el tradicional «Buenas noches» de la Madre General y del Rector Mayor.
La primera en dirigirse a los jóvenes fue Sor Chiara Cazzuola, Madre General de las Hijas de María Auxiliadora, que comenzó agradeciendo la oportunidad de estar presentes. «Queridos jóvenes, os agradezco esta oportunidad de dirigirme a vosotros al final de esta hermosa e intensa jornada en la que hemos vivido muchos momentos de gran experiencia que nos han hecho más cercanos y fuertes en la fe», dijo.
Destacando la figura de María, que en esta Jornada Mundial de la Juventud sirve de «modelo» para todos los jóvenes, la Madre General subrayó la disponibilidad de la madre de Jesús para «ir a servir a los que necesitan su ayuda», demostrando a todos que el impulso misionero [de María] debe «animar todas nuestras acciones».
Como sabemos, la vida de Don Bosco estuvo guiada por la presencia de María, que le orientó e iluminó. «Es interesante constatar que la primera en formar en Don Bosco una sencilla y sincera devoción mariana es su madre. Margarita educa a Juan a sentir a María como una ayuda siempre presente, incluso en los momentos difíciles, de soledad, de responsabilidad. En el sueño de los nueve años, la «buena pastora» se convierte en el modelo, en el punto de referencia de su acción entre sus compañeros. Incluso en el doloroso camino del oratorio, María está presente como signo de esperanza y es presencia activa en medio de los jóvenes», subrayó la Madre General de las FMA en la «Buena tarde».
En conclusión, Sor Chiara Cazzuola deseó que todos puedan encontrar en estos días la «presencia de María» como «poderosa Guía y Ayuda».
Las «Buenas noches» del Rector Mayor
El Rector Mayor de los Salesianos, P. Ángel Fernández Artime, comenzó su intervención destacando la «gran alegría» de encontrarse con todos los jóvenes.
Haciendo hincapié en que peregrinar es muy diferente a ir de vacaciones, el Rector Mayor subrayó: «peregrinar es muy diferente a ir de vacaciones. Y vosotros, queridos jóvenes, estáis hoy aquí como peregrinos, siempre en busca del Señor Jesús, ciertamente en búsqueda, y respondiendo de manera juvenil y salesiana a la invitación que nos ha hecho el Papa Francisco».
Asegurando que ningún joven se sentirá defraudado con esta experiencia del SYM, el Rector Mayor aseguró que al final de estos días todos sentirán que «todo valió la pena».
«Os puedo asegurar, queridos jóvenes, que no os vais a sentir defraudados con esta experiencia de JMJ; os puedo asegurar que sentiréis, cuando nos despidamos al final de estos días, y después aún más intensamente, que todo ha merecido la pena y que, en cierto modo, ya no sois los mismos de antes, porque llevaréis tanto en la memoria de vuestro corazón; Os puedo asegurar que, como María, todo lo que hagáis para vivir como jóvenes discípulos y misioneros cristianos -a veces en búsqueda y sin todas las certezas, como ya os he dicho- os llenará de felicidad; estoy seguro de que durante el resto de vuestras vidas recordaréis lo vivido en la JMJ, y os puedo asegurar, como decía Don Bosco a sus muchachos, que Jesús nunca os defraudará, al contrario», subrayó.
Al final de su intervención, el P. Ángel Fernández Artime utilizó las palabras de Don Bosco: «Quiero que seáis felices aquí» y, antes de terminar, lanzó un reto a todos: «queridos chicos y chicas: soñad algo hermoso y auténtico para vuestras vidas partiendo de Dios, dad los pasos cada día para hacerlo realidad, y contagiad a muchos otros».
La velada terminó en fiesta, con la certeza de que Don Bosco y Madre Mazzarello nos acompañarán siempre, sea cual sea el sueño que soñemos….